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A los jugadores de fútbol del Club
Atlético Belgrano – Córdoba – Argentina
Circular n.01
Anápolis – GO (Brasil), 10 de
septiembre de 2011
Estimados, mientras vivimos aqui em
La tierra, tenemos que luchar continuamente para conquistar el
Cielo... somos soldados de Dios: “La vida
del hombre sobre la tierra es una vida de soldado”
(Jó 7, 1).
El jugador debe jugar fútbol con
alegría y entusiasmo, sin olvidarse de luchar diariamente para
conquistar el Cielo.
Nada en este mundo, ni aun el fútbol
debe desviar el atleta del camino de Dios… el soldado, es decir, el
hijo de Dios, no debe colgar las armas:
“Mientras dure este nuestro caminar para más allá del mundo, no hay
que colgar las armas ni esperar descanso. ¡Todos los días son de
lucha! No es contra la carne y la sangre que peleamos, sino, contra
las potestades del infierno” (Pe. Alexandrino
Monteiro).
Si deseamos realmente conquistar la
Vida Eterna, debemos abandonar el camino fácil y entrar por el
camino estrecho; porque ese es el camino del Cielo:
“Angosta es la puerta y estrecho el camino
que conducen a la salvación y son pocos los que dan con él”
(Mt 7, 14).
¡Ahora es tiempo de lucha! El atleta
también debe luchar para vivir santamente y salvar su alma…El atleta
no puede dejar para después, porque él no es un superhéroe y también
morirá: “Acuérdate de que todos morirán”
(Eclo 8, 7).
El jugador de fútbol tiene el deber
de luchar diariamente… de expulsar la cobardía, de no traicionar más
a Dios… de amar y servir al Creador por sobre todas las cosas… de
renunciar al Demonio, al mundo y a todos sus lujos y vanidades.
El atleta debe sacudirse la pereza y
trabajar como un buen soldado de Cristo Jesús.
Queridos, la vida es una lucha, pero
quien sale de ella vencedor, tiene como premio la gloria del Cielo
para siempre… por eso vale la pena luchar constantemente.
La vida es corta y la lucha es breve…
comparando con la eternidad la lucha es breve. Tras la lucha seguirá
el descanso eterno: “Muy bien servidor
bueno y honrado; ya que has sido fiel en lo poco, yo te confiaré
mucho más. Ven a compartir la alegría con tu Señor”(Mt
25, 21).
Lean todos los días un trecho de la
Sagrada Escritura.
Rezo por ustedes y sus familiares.
Rezo también por la dirección e
hinchada de este simpático equipo.
Los bendigo y los guardo en el
Sagrado Corazón de Jesús.
Atentamente,
Pe. Divino
Antonio Lopes PF.
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