Instituto Missionário dos Filhos e Filhas da Paixão de Nosso Senhor Jesus Cristo e das Dores de Maria Santíssima

Diriangén Fútbol Club

(Diriamba – (Departamento de Corazo) – Nicarágua)

 

Circular 01

A los jugadores de fútbol del Diriangén Fútbol Club – Diriamba (Departamento de Corazo) – Nicarágua

 

Circular n° 01

 

Anápolis – GO (Brasil), 14 de febrero de 2012

 

Estimados, amen a Dios de corazón y no dejen que el deporte perjudique ese amor. Recuerden siempre que la vida no tiene sentido lejos del amor de Dios: “Como sois felices por haber comprendido que Dios es todo y la criatura nada, que sólo Dios merece el homenaje supremo del corazón, de la vida y de todos los bienes” (San Pedro Julián Eymard).

 

Qué es el atleta lejos del amor de Dios? És una lata vacía... un montón de basura...una hoja llevada por el viento de la vanidad y de la tentación.

Para amar verdaderamente a Dios, es necesario depurar el corazón de todo aquello que desagrada a Nuestro Señor, un corazón lleno de cosas caducas de la tierra, no puede amar a Dios: “Para llegar a amar a Dios de todo corazón es necesario deshacerse de todo lo que no es de Dios o que no nos lleva hasta Dios” (Santo Alfonso María de Ligorio).

E jugador de fútbol no puede colocar el deporte en el lugar de Dios... Nuestro creador debe siempre de ocupar el primer luagar en la vida del atleta.

Queridos, cómo es bello, cómo es grande conocer, amar y servir a Dios! Es la única cosa que tenemos para hacer en este mundo. Todo lo que hacemos fuera, es tiempo perdido.

Dios nos colocó en la tierra para ver cómo nos comportaríamos, y si lo amaríamos; pero nadie permanece en la tierra para siempre.

El hombre fue creado para el amor, es por eso que es tan propenso a amar.

El hombre creado para el amor no puede vivir sin el amor; o ama a Dios, a sí mismo o ama al mundo.

No se puede amar a Dios sin testimoniarle ese amor nuestro con nuestras obras.

Amar a Dios con todo nuestro corazón, es amarlo sólo a Él, y hacerlo presente en todo lo que amamos (cfr. San Juan María Vianney, Escritos).

Las conquistas en el fútbol son granos de arena comparadas con la grandeza de Dios.

Jueguen fútbol sin deslumbrarse con sus “glorias”... ellas pasan con el tiempo; mientras que Dios es eterno.

Rezo por ustedes y sus familiares.

Los bendigo y los guardo en el Corazón Santísimo de Cristo Jesús.

Atentamente,

 

Pe. Divino Antonio Lopes FP.