A los jugadores de fútbol del Club
Sporting Cristal – Lima – Distrito del Rimac – Perú
Circular n.01
Anápolis – GO (Brasil), 10 de
septiembre de 2011
Queridos, tomen cuidado con las
personas… solamente en Jesús Cristo encontrarán una amistad
verdadera: “Quien escogió a Jesús como
amigo, a la sombra de buen árbol se puso” (Pe
Alexandrino Monteiro).
El jugador de fútbol posee muchos
amigos; ¿Será que todos son confiables? ¿Es posible contar con la
ayuda y colaboración de ellos en las horas de dificultad?
Existen amigos que lo son sólo de
nombre… sólo de mesa… de paseos… interesados.
Si el atleta desea poseer una amistad
verdadera y segura, que la busque en Jesús Cristo; solamente en
Nuestro Señor él la encontrará.
Jesús Cristo es un amigo que nos
protege y nos apoya sin interés. Él nos fortalece en los momentos de
batalla y nos dará la victoria contra los enemigos visibles e
invisibles.
El jugador de fútbol que sigue las
falsas amistades, camina hacia la perdición; pero el que sigue a
Jesús Cristo se puso en el camino de la salvación, porque ser amigo
de Nuestro Señor es ser amigo de Dios, del bien y de la virtud… No
camina en las tinieblas, sino que anda por el camino de la
luz:
“Yo soy la luz del mundo. Quien me sigue no
andará en la oscuridad, sino que tendrá la luz eterna de la vida”
(Jo 8, 12).
La amistad con Jesús nos ilumina,
mientras que la amistad falsa nos sumerge en las tinieblas del error
y del pecado.
Queridos, es imposible ser amigo de
Jesús Cristo y ser amigo del mundo, del Demonio y del pecado; para
ser amigo de Dios es necesario arrancar del corazón todo lo que no
Le agrada… es necesario desaprenderse de las cosas caducas:
“Desprendamos el corazón de todas la
creaturas. Quien está agarrado a alguna cosa de la tierra, por más
mínima que sea, nunca podrá volar y unirse por completo a Dios”
(Santo Alfonso María de Ligorio).
Jesús Cristo quiere que nuestro
corazón sea solamente Suyo… Él no acepta un corazón dividido.
Lean todos los días un trecho de la
Sagrada Escritura.
Rezo por ustedes y sus familiares.
Rezo también por la dirección e
hinchada de este poderoso equipo.
Los bendigo y los guardo en el
Santísimo Corazón de Cristo Jesús.
Atentamente,
Pe. Divino
Antônio Lopes PF.
|