Anápolis, 21 de Febrero de 2005
Para el joven Guillermo Barros
Schelotto
Jugador del Club Atlético Boca Juniors
Buenos Aires -
Argentina
Estimado atleta:
¡Que la alegría del corazón de María
Santísima esté llenando tu corazón!
Si buscas la verdadera paz, estoy
seguro que solamente la encontrarás en el Señor Jesucristo. Él es el
Señor que llena nuestro corazón con aquella paz inagotáble, y que el
mundo enemigo de Dios no puede darte: “Mi paz os dejo, mi paz os
doy, no como el mundo la dá”
(San Juan 14:27).
En el fútbol existe mucha competencia
y envidia, sé cauteloso y no te mezcles con estos grupos, cuenta con
la amistad de Cristo Jesús y Él te ayudará: “El amor de la
criatura es engañoso y mutable, pero el amor de Jesús es fiel y
constante” (Tomas de
Kempis, Imitación de Cristo, Libro II – Cap VII).
Rece todos los días esta oración,
pidiendo la protección a tu ángel de la guarda y él te protegerá de
los enemigos visibles e invisibles: “A tu cuidado me encomiendo
oh santo Ángel, pues a tu guardia me confió la divina bondad. Soy
ciego, guíame; soy ignorante, instrúyeme; soy débil, confortame; soy
pequñito, protégeme; soy un caminante extraviado, condúzeme
nuevamente a la verdadera senda; soy perezoso, estimúlame; soy
lento, anímame para progrsar en el bien. Sobre todo, haz que en la
lucha peligrosa que tendré contra los demonios en mi muerte, tenga
un final feliz, para que cuando sea un compañero tuyo en el cielo,
pueda cantar alegremente el himno de la victoria: “Se rompió el lazo
y salimos libres de allí” (San Pedro Canísio, De excell, cael. Spiritum, in primis de Angeli
Custódio ministerio, cap. Últ. Orat. 5).
¡Felices Pascuas!
Te bendigo y te guardo en el purísimo
Corazón de Nuestra Señora.
Padre Divino Antônio Lopes FP
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