CUARTO MANDAMIENTO DE LA LEY DE DIOS

 (Resumen)

(Madre Mariana de Nuestra Señora de los Dolores)

1. ¿Qué nos ordena el cuarto Mandamiento: Honrar padre y madre?

R= El cuarto Mandamiento: Honrar padre y madre, ordena a respetar al padre y a la madre, no es pecado obedecerlos en todo y auxiliarlos en  sus necesidades espirituales y temporales.

2. ¿Qué nos prohibe el cuarto Mandamiento?

R= El cuarto Mandamiento nos prohíbe ofender a nuestros padres con palabras, obras, o de cualquier outra manera.

3. Debajo del nombre del padre y de la madre, ¿qué otras personas comprenden en este mandamiento?

R= Debajo del nombre del padre y de la madre, este Mandamiento también comprende todos los legítimos superiores, tanto eclesiásticos como seculares, los cuales por tanto debemos obedecer y respetar.

4. ¿ De dónde viene la autoridad de los padres de mandar en sus hijos, y  de los hijos de obedecerles?

R= Les viene de Dios, que constituyó y ordenó a la família a fin de que en ella el hombre encuentre los primeros medios necesarios para su perfecccionamiento matérial y espiritual.

5. ¿ Tienen los padres deberes para con los hijos?

R= Los padres tienen el deber de amar, cuidar y alimentar a sus hijos, de proveer su educación religiosa y civil, de darles el buen ejemplo, de alejarlos de las ocasiones del pecado, de corregirlos en sus faltas y de auxiliarlos en abrazar el estado para el cual son llamados por Dios.

6. ¿ Nos dio Dios el modelo de la família perfecta?

R= Dios nos dio el modelo de la família perfecta en la Sagrada Familia, en la cual Jesus Cristo vivió sujeto a Maria Santísima y a San José hasta los treinta años, esto es, hasta cuando comenzó a desempeñar la misión que el  Padre Eterno le confiara, el de predicar el Evangelio.

7. ¿Podrían las famílias, si viviesen aisladas una de las otras, proveer a todas sus necesidades materiales y morales?

R= Si las famílias viviesen aisladamente unas de las otras, no podrían proveer sus necesidades, es necesario que ellas se unan en una sociedad civil, a fin de auxilarse mutuamente, para su perfeccionamiento y para su felicidad común.